Desarrollo y Técnica

En el tenis actual la intensidad de juego desarrollada, nos permite darnos cuenta que la capacidad condicional que mas ha evolucionado en estos tiempos, es sin duda la fuerza.

Cuando me refiero a la fuerza, es acerca de la fuerza máxima, al máximo reclutamiento fibrilar que desarrolla el músculo, siendo este el punto de partida para ejercitar en nuestro deportista otros subelementos de la misma, como fuerza resistencia o fuerza explosiva.

Esto quiere decir que si contamos con un gran reclutamiento de fibras, a estas podemos transferirlas luego a lo que podría llamarse fuerza resistencia o fuerza explosiva, por ejemplo si realizamos un ejercicio como press de pecho o también denominado pecho plano, con una carga que solo nos permita ejecutar no más de tres repeticiones, estaremos activando un importante numero de fibras musculares, si luego de esto realizamos unas series de lagartijas con aplauso a máxima velocidad en no más de cinco repeticiones, estaremos ejercitando la fuerza explosiva, si superamos este numero de repeticiones y llegamos a realizar 10 o 12, estaremos desarrollando la fuerza resistencia.

Pero como dije anteriormente, la intensidad del juego actual nos obliga, nos condiciona a desarrollar importantes niveles de fuerza, de fuerza explosiva. En el tenis actual los puntos son de corta duración por lo que el jugador continuamente debe reaccionar a una máxima velocidad y niveles de fuerza, característica propia de la fuerza explosiva.

Ejercicios dinámicos en el gimnasio, como cargadas, arranques, tirones, pliometría en todos sus niveles, transferencias en ejercicios básicos (ejemplo anterior de pecho y lagartijas), son los principales componentes a tener en cuenta al momento de trabajar sobre este tipo de fuerza.

Mucho tiene que ver en este tema la genética como así también la estimulación en cuanto a las fibras musculares: al nacer contamos con una gran cantidad de fibras explosivas, otras rápidas, y otras lentas, y existen algunas que son intermedias y de acuerdo a la actividad que se desarrolle podrán transferirse a explosivas o rápidas, esto dependerá de los estímulos motrices que desarrolle el joven en su infancia; por ejemplo si realiza una actividad como futbol o tenis, estimulará un mayor numero de fibras explosivas que si practica solo natación, esto no quiere decir que practicar natación sea contraproducente, sino que es conveniente combinar esta practica con otras, de características más explosivas, de modo que si en un futuro el joven desea ingresar a la practica de un deporte de componentes más explosivos, no se encuentre con déficits de este tipo de fuerza.

Si bien las fibras explosivas nos brindan menores niveles de energía en cuanto a tiempo con respecto al aporte de las fibras rápidas y lentas, las intensidades son mucho más altas, sus niveles de tracción son muy superiores.

Un buen desarrollo de esta capacidad le brindara al deportista una economía de movimiento adecuada, una correcta anticipación en el desarrollo de las jugadas, así como también ejecuciones a grandes niveles de velocidad y precisión mediante óptimos niveles de reacción.

Sin lugar a duda es el estilo de trabajo a tener en cuenta y desarrollar en la competencia por el tenista en todas sus etapas de desarrollo.